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¿Qué es un plan de recuperación ante desastres (DRP)?

Un plan de recuperación ante desastres (DRP, por sus siglas en inglés) es un enfoque estructurado que describe los procedimientos y las herramientas para restaurar los sistemas informáticos críticos, los datos y las operaciones tras un ciberataque, un desastre natural u otra interrupción. Ayuda a garantizar la continuidad de la actividad definiendo medidas para minimizar el tiempo de inactividad y salvaguardar los activos vulnerables.

¿Qué es la recuperación ante desastres?

La recuperación ante desastres (DR, por sus siglas en inglés) es el proceso estratégico de restaurar sistemas y datos de TI críticos después de un incidente inesperado, como un desastre natural, un ciberataque o una falla de hardware. La DR se centra en reducir el tiempo de inactividad, salvaguardar la información confidencial y garantizar la continuidad empresarial devolviendo rápidamente la plena funcionalidad a los sistemas. En el panorama actual de amenazas, en el que los ciberataques son cada vez más sofisticados, una estrategia sólida de recuperación ante desastres es esencial para mitigar los riesgos y mantener la resiliencia operativa.

En esencia, la recuperación ante desastres no se trata solo de recuperarse, sino de mantenerse a la vanguardia. Las organizaciones deben prepararse de manera proactiva para los peores escenarios mediante una planificación integral, pruebas periódicas y el uso de herramientas avanzadas de ciberseguridad. Este enfoque garantiza la capacidad de recuperarse rápidamente de las interrupciones y, al mismo tiempo, minimiza los efectos a largo plazo en la productividad, la reputación y el cumplimiento.

 

¿Cómo funciona un DRP?

Un plan de recuperación ante desastres eficaz no solo se centra en responder a incidentes: está diseñado para minimizar el impacto de las interrupciones y garantizar que una empresa pueda seguir operando en medio de circunstancias imprevistas. Para lograr esto, un DRP se basa en tres pilares clave.

Prevención

La primera línea de defensa en cualquier DRP es la prevención. Esto implica identificar riesgos y vulnerabilidades potenciales en toda la infraestructura de una organización e implementar medidas para mitigarlos. Desde la gestión de parches hasta la segmentación, esfuerzos proactivos como estos reducen la probabilidad de interrupciones y garantizan un entorno resistente.

Detección

A pesar de las medidas preventivas, ningún sistema es completamente inmune a las interrupciones. La detección se centra en identificar los problemas tan pronto como surjan. Al aprovechar las herramientas de supervisión, los sistemas de alerta y la inteligencia continua sobre amenazas, las organizaciones pueden detectar rápidamente anomalías o violaciones e iniciar los protocolos de respuesta necesarios antes de que se produzcan daños mayores.

Corrección

Una vez detectado un incidente, las organizaciones pueden restaurar los sistemas, datos y operaciones afectados a su estado normal. Esto podría incluir recurrir a copias de seguridad seguras, reconfigurar sistemas comprometidos o implementar recursos alternativos para garantizar la continuidad de la actividad empresarial

Un DRP bien documentado y probado garantiza una recuperación rápida y con mínima interrupción, ayudando a una organización a volver a sus operaciones normales de la manera más eficiente posible.

 

¿Por qué es esencial un DRP?

En el mundo interconectado de la actualidad, las ciberamenazas son más sofisticadas e implacables que nunca. Un DRP garantiza que cuando (no si) se produzca una interrupción, su empresa pueda restaurar rápidamente los sistemas críticos y minimizar el tiempo de inactividad. Sin un sólido DRP, incluso una breve interrupción podría provocar pérdidas financieras significativas, daños a la reputación y la pérdida de la confianza de los clientes. La capacidad de recuperarse rápidamente de una violación o de una falla del sistema no es solo una ventaja competitiva; es un imperativo empresarial.

Además, los marcos regulatorios se están haciendo más exigentes y los requisitos de cumplimiento exigen que las organizaciones demuestren resiliencia frente a violaciones de datos y fallas de sistema. Un DRP bien elaborado no solo ayuda a cumplir estas exigencias normativas, sino que también sirve como piedra angular de una estrategia de gestión de riesgos más amplia. Garantiza que su empresa pueda mantener las operaciones, proteger los datos confidenciales y salvaguardar su viabilidad a largo plazo, incluso ante acontecimientos inesperados.

 

Tipos de DRP

Los DRP pueden adoptar diferentes maneras según las necesidades, los riesgos y las prioridades específicas de su organización. A continuación se presentan algunos de los tipos de DRP más implementados:

  • DRP del centro de datos: Se centra en restaurar y asegurar los centros de datos físicos y virtuales de una organización después de un incidente. Esto incluye la recuperación de servidores, almacenamiento e infraestructura de red, a menudo con el objetivo de minimizar el tiempo de inactividad.
  • DRP en la nube: Diseñado para restaurar y proteger sistemas y datos basados en la nube. Este tipo de plan aborda los riesgos específicos de la nube, como interrupciones del servicio, violaciones de datos o pérdida de conectividad, garantizando que los entornos y servicios de la nube puedan volver rápidamente al estado operativo.
  • DRP ante incidentes de ciberseguridad: Diseñado a medida para responder y recuperarse de ciberataques, como ransomware, violaciones de datos o ataques DDoS. El plan incluye pasos para aislar los sistemas comprometidos, gestionar las comunicaciones y restaurar datos a partir de copias de seguridad, garantizando al mismo tiempo que se aborden las vulnerabilidades para evitar futuros ataques.
  • DRP de continuidad empresarial: este plan integral combina la recuperación ante desastres con estrategias de continuidad empresarial más amplias para garantizar que todas las funciones críticas (tanto técnicas como operativas) sigan funcionando durante una crisis, desde los canales de comunicación hasta los servicios esenciales.

 

Pasos para crear un DRP eficaz

Elaborar un plan de recuperación en caso de desastres (DRP) va más allá de marcar casillas: se trata de crear resiliencia en el tejido de su organización. Siga estos pasos clave para asegurarse de estar preparado para recuperarse de manera rápida y segura cuando ocurra un desastre.

  • Evaluar los posibles riesgos e impactos: Comience realizando una evaluación de riesgos exhaustiva para identificar posibles amenazas a sus operaciones. Céntrese en los riesgos de ciberseguridad, los costos del tiempo de inactividad y los sistemas críticos que deben priorizarse en un escenario de catástrofe.
  • Definir los objetivos de recuperación: Establezca objetivos claros de tiempo de recuperación (RTO, por sus siglas en inglés) y de punto de recuperación (RPO, por sus siglas en inglés) para fijar las expectativas sobre la rapidez y la cantidad de datos que deben recuperarse. Estos puntos de referencia guiarán el resto de su planificación.
  • Desarrollar un plan de respuesta y comunicación: Describa quién será responsable de ejecutar cada fase del proceso de recuperación ante desastres y asegúrese de que los canales de comunicación sean seguros y estén bien establecidos. Esto incluye tanto a equipos internos como a socios o proveedores externos.
  • Probar y actualizar con regularidad: Pruebe regularmente su DRP mediante simulaciones y simulacros en condiciones reales para asegurarse de que todo funcione como se espera. Perfeccione el plan en función de los resultados y ajústelo a cualquier amenaza de ciberseguridad emergente o cambios operativos.
  • Integrar con la planificación de la continuidad empresarial: Asegúrese de que su DRP forme parte de su estrategia de continuidad empresarial general, que aborda tanto la recuperación inmediata en caso de catástrofe como la sustentabilidad a largo plazo. 
     

Este enfoque integral le ayudará a salvaguardar su organización tanto de las interrupciones a corto plazo como de los riesgos a largo plazo.

Plan de Recuperación ante Desastres vs. Plan de Continuidad Empresarial (BCP, por sus siglas en inglés)

Mientras que el DRP se centra en restaurar los sistemas informáticos tras un suceso disruptivo, el BCP adopta un enfoque más amplio para garantizar que toda la organización pueda seguir funcionando durante y después de una crisis. Comprender las diferencias entre estos dos planes es fundamental para proteger su empresa contra el tiempo de inactividad y la pérdida de datos.

Plan de recuperación ante desastres (DRP)

Plan de continuidad empresarial (BCP)

Alcance

Se centra principalmente en los sistemas informáticos y la recuperación de datos

Abarca las operaciones comerciales generales, incluidos TI, personal, instalaciones y comunicación.

Objetivo

Restaura la infraestructura informática crítica y el acceso a los datos.

Garantiza la continuidad de todas las funciones comerciales esenciales.

Plazo

Se activa después de una catástrofe para recuperar activos informáticos

Se activa durante y después de una interrupción para mantener la actividad empresarial.

Ejemplos de interrupciones cubiertas

Ciberataques, fallas de hardware, corrupción de datos

Desastres naturales, interrupciones en la cadena de suministro, escasez de personal y fallas de TI

Componentes clave

Copias de seguridad de datos, recuperación de servidores, restauración de redes

Planes de comunicación, seguridad de los empleados, lugares de trabajo alternativos y gestión de proveedores

Propiedad

Equipos de TI y ciberseguridad

Liderazgo ejecutivo, RR.HH., operaciones y TI

¿Por qué las organizaciones necesitan ambos? 

Tanto un DRP como un BCP son partes esenciales de la estrategia de gestión de riesgos de una organización, pero cumplen diferentes propósitos. El plan de recuperación ante desastres garantiza que los sistemas de TI se restablezcan rápidamente después de una interrupción, pero sin un plan de continuidad empresarial (BCP), la organización aún puede enfrentar una paralización operativa. \

Al integrar ambos planes, las empresas pueden proteger sus activos digitales y, al mismo tiempo, garantizar que las funciones comerciales clave se mantengan durante las crisis, minimizando la pérdida de ingresos, manteniendo la confianza del cliente y cumpliendo con los requisitos regulatorios.

 

Beneficios del DRP

Un DRP bien estructurado es más que una red de seguridad: es un enfoque proactivo para garantizar la resiliencia frente a ciberamenazas e incidentes inesperados. Le presentamos cuatro ventajas clave de la implementación de un DRP:

  • Tiempo de inactividad minimizado: El DRP garantiza la rápida restauración de los sistemas, aplicaciones y datos críticos, reduciendo el tiempo de inactividad operativa y mitigando la posible pérdida de ingresos.
  • Seguridad de datos mejorada: Al integrar protocolos de respaldo y recuperación, un DRP ayuda a proteger datos confidenciales contra pérdida o corrupción, especialmente en caso de un ciberataque o falla del sistema.
  • Cumplimiento normativo: Muchas industrias requieren planes de recuperación ante desastres sólidos para cumplir con los estándares de cumplimiento. Contar con un DRP denota un compromiso con la protección de los datos y la garantía de la continuidad empresarial, lo que ayuda a evitar multas costosas.
  • Mayor confianza del cliente: Contar con un DRP garantiza a los clientes y partes interesadas que su organización está preparada para recuperarse rápidamente, manteniendo la confiabilidad del servicio incluso ante interrupciones.

 

Cómo puede ayudar Zscaler

Zscaler Resilience™ es un conjunto integral de capacidades que garantiza que sus operaciones permanezcan ininterrumpidas durante caídas de tensión, apagones o eventos de cisne negro.

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Construida sobre la mayor nube de seguridad del mundo, Resilience aprovecha una avanzada arquitectura nativa de la nube y un historial de excelencia operativa, ofreciendo alta disponibilidad y capacidad de servicio en todo momento. Con opciones capaces de conmutación por error y recuperación ante desastres controlada por el cliente (incluso durante catástrofes), las organizaciones pueden contar con:

  • Continuidad empresarial con seguridad ininterrumpida mediante la aplicación de políticas de seguridad críticas al tiempo que se garantiza el acceso Zero Trust a Internet, SaaS y aplicaciones privadas.
  • Experiencias sin interrupciones en todos los escenarios de falla para que pueda gestionar apagones, caídas de tensión y fallas catastróficas con facilidad aprovechando la mejor arquitectura distribuida de su clase y la resiliencia probada de Zero Trust Exchange.
  • Reducción de los costos y la complejidad al evitar las interrupciones de la actividad empresarial y las pérdidas de productividad causadas por la falta de acceso a las aplicaciones críticas, al tiempo que se eliminan los costos de la infraestructura de copia de seguridad heredada y las VPN locales.

 

¿Quiere saber más acerca de por qué Zscaler Resilience es la piedra angular perfecta para la continuidad empresarial? Programe unademostración con uno de nuestros expertos, que le explicará todas nuestras funciones avanzadas y cómo aplicarlas a su DRP.

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Preguntas frecuentes

El plan de recuperación ante desastres debe probarse al menos una vez al año; se recomienda realizar pruebas más frecuentes después de actualizaciones importantes del sistema, cambios de infraestructura o amenazas de ciberseguridad para garantizar la eficacia y la alineación con las nuevas necesidades empresariales.

Sí, un DRP puede ayudar a las pequeñas empresas a minimizar el tiempo de inactividad, proteger los datos y garantizar la continuidad empresarial, al igual que una empresa. Independientemente del tamaño de una empresa, un DRP mitiga los riesgos, refuerza la ciberseguridad y garantiza una rápida recuperación tras los incidentes, algo crucial para mantener la confianza de los clientes y la estabilidad operativa.